Junto a la entrada de la Casa-Torre se encuentra una escultura, que yo recordaba de la anterior vez que estuve visitando este paraje cuando era un niño de 10 años, y que representa el momento de la llegada a casa, medio moribundo, de Iñigo de Loyola, herido en la defensa de la ciudadela de Pamplona.
Una bala francesa le rompió la pierna derecha por debajo de su rodilla, haciéndole prisionero.
Días después le dejaron partir hacia su lugar de orígen donde los médicos trataron inutilmente de ajustar sus huesos de la mejor manera posible.
Una bala francesa le rompió la pierna derecha por debajo de su rodilla, haciéndole prisionero.
Días después le dejaron partir hacia su lugar de orígen donde los médicos trataron inutilmente de ajustar sus huesos de la mejor manera posible.
Lugar en que se hallaba la habitación de los padres de Iñigo Yáñez de Oñaz y Saenz de Licona. que era como se llamaba nuestro Santo fundador de la Compañia de Jesús, aunque él se hiciese llamar IÑIGO LÓPEZ DE LOYOLA. Aquí nació en el año 1.491. En la Parroquia de Azpeitia se venera la pila bautismal en que fué bautizado.
El cuadro referente a la maternidad divina de María evoca esta otra maternidad humana .
La estela de roble de formas abstractas quiere significar a un retoño natural de la tierra vasca.
En la pared, encima del cuadro, se puede leer "HEMEN JAIO ZEN", "AQUÍ NACIÓ".
Vidrieras en que se recogen escenas de la vida del Santo y de otros miembros y datos de la Cía de Jesús.
El cuadro referente a la maternidad divina de María evoca esta otra maternidad humana .
La estela de roble de formas abstractas quiere significar a un retoño natural de la tierra vasca.
En la pared, encima del cuadro, se puede leer "HEMEN JAIO ZEN", "AQUÍ NACIÓ".
Vidrieras en que se recogen escenas de la vida del Santo y de otros miembros y datos de la Cía de Jesús.
Dejamos la montaña. Es Domingo. Continúa la lluvia golpeando nuestra vista. Nos dirigimos hacia un lugar, como dicen los periodistas: "Emblemático". Societatis Jesu.
Pero antes, un apunte a nuestro comentario anterior. El lector avezado se habrá dado cuenta que no hemos mencionado en ningún momento la tan cacareada gastronomía vasca y más concretamente la donostiarra. Hemos bebido toda una vida en las fuentes de esta forma de comer, sus sabores y gustos inconfundibles. Pero esto por sabido y reconocido no merece que nos detengamos más en ello. Para eso ya están los medios de comunicación que nos meten por los ojos un día y otro también a los mismos cocineros de siempre.
El significado de este comentario es más pedestre. SUS PRECIOS. Y seguimos "picando" y "tragando" como si no nos diésemos cuenta o no importase su coste. Afirmo que lo que realiza la hostelería donostiarra es un ATRACO a Pincho Armado. No voy a insistir en este tema, pero merecen un castigo por seguir penalizando a las gentes que, como incautos, nos acercamos hasta la parte vieja donostiarra. Una y no más Santo Tomás. Ya me han visto.
Como era Domingo y día de elecciones, no teníamos ensayo de la Novena de Beethoven, lo que aprovechamos mi santa esposa y yo para acercarnos hasta este imponente Santuario ubicado entre Azpeitia y Azkoitia, aunque pertenezca al primero. Esta obra alumbrada en tiempos del Barroco, envuelve la que fue casa natal del Santo Ignacio de Loiola, una torre con evidente finalidad defensiva, que acoge una exposición permanente sobre la vida y vericuetos históricos de su época.
Previo pago de la entrada correspondiente, nos adentramos en la casa-torre sin guía pero con un tríptico explicativo de cada una de las partes que atravesábamos escrito en primera persona, como si nuestro guía fuera el propio Iñigo. Más arriba he dicho que visité esta Casa cuando tenía 10 años aproximadamente en una de las Excursiones que anualmente hacían los P.P.Claretianos con sus alumnos del Corazón de María, y esto es hace ya 50 años, pero había estancias que recordaba perfectamente, no así otras ya que se efectuó una reforma importante en el año 1.990.
Una vez finalizada la visita nos dirigimos a la Iglesia para oir misa en Euskara.
El Santuario, levantado en su honor, guarda similitudes evidentes con la Basílica de San Pedro en el Vaticano. Un discípulo de Bernini, Carlo Fontana fué quien realizó el diseño allá por el siglo XVII.
Llama la atención la tremenda cúpula de 20 mts. de diámetro con unos frescos excelentes y que ha sido restaurada recientemente. Como he dicho anteriormente, esta obra es un canto bellísimo al estilo barroco, pues atesora en ella, a pesar de que no tiene unas excesivas proporciones, todas las virtudes de ese movimiento artístico. Al mirar hacia la cúpula no puedes dejar de ver una impresionante lámpara de cristal de Bohemia. El Altar Mayor es de estilo churrigueresco, excesivo como todo lo de este arte pero que tuvo su porqué en la Contrareforma a las tésis que Lutero sembró por media Europa.
Como no podía ser de otra manera, dadas mis aficiones, aparte de rememorar viejos recuerdos, la intención de esta visita era ver de cerca y escuchar, el magnífico órgano que en ella se alberga. Una vez finalizada la Misa,en la cual, para mi sorpresa, comunicaron que ese mismo día a las 20,00 h. habría un Concierto a cargo de nuestro buen amigo Esteban Elizondo, le pregunté a una monitora si podía acceder al Coro para verlo más de cerca, indicándome que, podía hacerlo, dado que todavía se encontraba en el Coro la persona que lo tocaba. Así lo hice, esperando encontrarme con un Jesuita ya anciano que llevaría más de 40 años al frente de la consola. Nada más lejos de la realidad. La persona que había hecho tañer el instrumento durante la Eucaristía era una chica jóven que enseguida se puso a mi disposición.
No puedo remediarlo, cuando me pongo delante de uno de estos órganos imponentes me entra un miedo irracional a no estar a la altura.Aunque mis conocimientos sobre el instrumento van en aumento, mis carencias son abundantes, por lo que siento como que voy a quedar en evidencia. Luego, en conversación con ella, no fué así, pero mi temor persiste.
Así como mi falta de educación ya que ella me preguntó amablemente cómo me llamaba pero yo no lo hice a la recíproca. Me explicó alguna característica del instrumento como que no tiene, en fachada, ningún tubo "canónigo", quizá debido al poquísimo espacio que tuvieron los organeros para la caja y había que aprovecharlo al máximo. Me explicó , relativo a la registración, las características que le distinguen de otros Cavaillé-Coll, y me hizo una pequeña demostración.
Pero cuál no sería mi sorpresa, cuándo se bajó del asiento y me ofreció ocupar su puesto. Me hice el remolón, pero deseándolo en mi fuero interno, y al insistirme ya no me resistí. Fueron sólo cinco minutos pero estaba como en una nube. No acertaba a centrarme en una obra concreta y me limité a hacer una pequeña improvisación, animándome ella a que probase los distintos registros y combinaciones. Aquí sí, salió mi educación de colegio religioso, y me excusé, dejándole de nuevo su puesto en la consola. Siempre le estaré muy agradecido.
Y como no podía sacrificar más a mi señora esposa, esperando la hora del Concierto, me quedé con las ganas de escuchar a D. Esteban.
Pero no por ello me voy a olvidar de él ya que me basaré en sus escritos para describir mejor las características de este instrumento, empezando por hacer un poco de historia, que la tiene y no es sorprendente porque la historia, por repetida, ya no sorprende a nadie. Y me refiero al retraso en la entrega del instrumento en más de un año que desbarató los planes de la Cía. de inaugurarlo "para el día 22 de Julio por la extraordinaria solemnidad de las grandes funciones que van a preceder este año a la fiesta de San Ignacio de Loyola". Era el año 1.888.
Otro bello ejemplar de órgano romántico de la última época del famoso organero Cavaillé-Coll, que asimismo se ha mantenido en estado original, sin haber sufrido transformaciones sonoras. Su coste ascendió a 60.000 pesetas y según documentos aportados por Esteban Elizondo se entregó el 6 de Junio de 1.889 siendo inaugurado cuatro días más tarde. Por lo tanto, su entrega se retrasó casi un año, originándose un tenso cruces de cartas recriminatorias por parte del Presidente de la Junta Sr. Ibero, agravado por los problemas financieros que acuciaban al constructor.
Hay que resaltar que en este coste no estaba incluida la caja ya que la hicieron dos Hermanos Jesuitas llamados Urdampilleta y Velasco que eran carpinteros y escultores y que, por lo tanto, su coste corrió a cargo de la Compañía. Inclusive estos Hermanos tuvieron que corregir al arquitecto ya que éste no se había percatado de que el coro tenía el techo más bajo por un lado que por otro. Al arquitecto Sr. Recondo, no le quedó más remedio que darles la razón y modificar su proyecto inicial.
Su fondo es de pino del Norte y sus adornos de nogal. Dentro, alberga 2150 tubos, siendo los 22 exteriores cantantes ya que D. Ignacio Aldalur Pbro. y Organista de la Villa de Azpeitia y amigo de los P.P.Jesuitas, se empeñó en poner " un registro más de Trompeta Real, cuyos tubos, por no caber dentro de la caja, se colocaron, por fuerza, según se acostumbra en España, por fuera". Lo que supuso un incremento de 120 tubos sobre los aceptado en las condiciones de la compra. Esta es la explicación a mi pregunta que le hice a la organista.
Antes de la inauguración y como era preceptivo, se nombra a D. José Ignacio Aldalur y a D. Felipe Gorriti, gran compositor, y a la sazón Organista de Tolosa " para que reconozcan el órgano y den su autorizado dictámen de acuerdo con el plan y condiciones de la Escritura Pública que se les adjunta". Ambos firman en Azpeitia el 9 de Junio de 1.889 el informe que en resúmen dice que "el órgano es magnífico y muy digno de la alta y universal reputación de la casa Cavaillé-Coll". Gorriti cobró 1.000 reales por su trabajo, no así Aldalur que no cobró nada por el exámen y además regaló el juego de la Trompeta Real. Pero esto no tuvo nada de altruista porque lo hizo como compensación al porcentaje que se llevó del coste del órgano y que corrió a cargo del factor.
Charles Carloni, fué el hombre de confianza y principal responsable de la Casa Cavaillé-Coll en relación con la mayor parte de los trabajos de organería realizados en España y a quien se le concedieron notarialmente amplios poderes para todo lo relacionado con el contrato de éste en concreto, y quien dirigió las obras de instalación de este órgano.
Llama la atención la ubicación interna de la tubería y maquinaria del instrumento en un espacio extremadamente reducido y la existencia de una Trompeta de Batalla que no figura entre los registros de la consola, accionándose la misma por medio de un enganche de pedal. Fue restaurado en 1973 por Organería Española S.A.
Dispone de tres teclados manuales de 56 notas y uno de pedal de 30, con un total de 37 juegos.
Disposición sonora I Teclado
Principal 26
Violón 26
Flautado 13
Salicional 13
Flauta Armónica 13
Violón 13
Octava
Tapadillo
Docena
Quincena
Lleno 5 puntos
Trompeta Magna 26
Trompeta Real 13
Clarín
II Teclado
Principal 13
Unda Maris 13
Violón 13
Dulciana 61/2
Octavin
Campanilla 1-3 h.
Fagot-Oboe
Clarinete
III Teclado
Flauta Travesera 13
Viola de Gamba 13
Voz Celeste 13
Flauta Octvª 61/2
Trompeta 13
Clarin
Voz Humana
Corneta 5 puntos
Pedal
Flautado Mayor 26
Contrabajo 26
Flautado 13
Bombarda 26
Trompeta 13
Clarin
Enganches: I/P, II/P, III/P, II/I, III/I, III/II. Llamadas lengüetería exterior e interior. Trémolo II y III. Octavas graves I. Octavas graves III/I. Máquina neumática. Tempestad. Pedales de expresión II y III.
Pero antes, un apunte a nuestro comentario anterior. El lector avezado se habrá dado cuenta que no hemos mencionado en ningún momento la tan cacareada gastronomía vasca y más concretamente la donostiarra. Hemos bebido toda una vida en las fuentes de esta forma de comer, sus sabores y gustos inconfundibles. Pero esto por sabido y reconocido no merece que nos detengamos más en ello. Para eso ya están los medios de comunicación que nos meten por los ojos un día y otro también a los mismos cocineros de siempre.
El significado de este comentario es más pedestre. SUS PRECIOS. Y seguimos "picando" y "tragando" como si no nos diésemos cuenta o no importase su coste. Afirmo que lo que realiza la hostelería donostiarra es un ATRACO a Pincho Armado. No voy a insistir en este tema, pero merecen un castigo por seguir penalizando a las gentes que, como incautos, nos acercamos hasta la parte vieja donostiarra. Una y no más Santo Tomás. Ya me han visto.
Como era Domingo y día de elecciones, no teníamos ensayo de la Novena de Beethoven, lo que aprovechamos mi santa esposa y yo para acercarnos hasta este imponente Santuario ubicado entre Azpeitia y Azkoitia, aunque pertenezca al primero. Esta obra alumbrada en tiempos del Barroco, envuelve la que fue casa natal del Santo Ignacio de Loiola, una torre con evidente finalidad defensiva, que acoge una exposición permanente sobre la vida y vericuetos históricos de su época.
Previo pago de la entrada correspondiente, nos adentramos en la casa-torre sin guía pero con un tríptico explicativo de cada una de las partes que atravesábamos escrito en primera persona, como si nuestro guía fuera el propio Iñigo. Más arriba he dicho que visité esta Casa cuando tenía 10 años aproximadamente en una de las Excursiones que anualmente hacían los P.P.Claretianos con sus alumnos del Corazón de María, y esto es hace ya 50 años, pero había estancias que recordaba perfectamente, no así otras ya que se efectuó una reforma importante en el año 1.990.
Una vez finalizada la visita nos dirigimos a la Iglesia para oir misa en Euskara.
El Santuario, levantado en su honor, guarda similitudes evidentes con la Basílica de San Pedro en el Vaticano. Un discípulo de Bernini, Carlo Fontana fué quien realizó el diseño allá por el siglo XVII.
Llama la atención la tremenda cúpula de 20 mts. de diámetro con unos frescos excelentes y que ha sido restaurada recientemente. Como he dicho anteriormente, esta obra es un canto bellísimo al estilo barroco, pues atesora en ella, a pesar de que no tiene unas excesivas proporciones, todas las virtudes de ese movimiento artístico. Al mirar hacia la cúpula no puedes dejar de ver una impresionante lámpara de cristal de Bohemia. El Altar Mayor es de estilo churrigueresco, excesivo como todo lo de este arte pero que tuvo su porqué en la Contrareforma a las tésis que Lutero sembró por media Europa.
Como no podía ser de otra manera, dadas mis aficiones, aparte de rememorar viejos recuerdos, la intención de esta visita era ver de cerca y escuchar, el magnífico órgano que en ella se alberga. Una vez finalizada la Misa,en la cual, para mi sorpresa, comunicaron que ese mismo día a las 20,00 h. habría un Concierto a cargo de nuestro buen amigo Esteban Elizondo, le pregunté a una monitora si podía acceder al Coro para verlo más de cerca, indicándome que, podía hacerlo, dado que todavía se encontraba en el Coro la persona que lo tocaba. Así lo hice, esperando encontrarme con un Jesuita ya anciano que llevaría más de 40 años al frente de la consola. Nada más lejos de la realidad. La persona que había hecho tañer el instrumento durante la Eucaristía era una chica jóven que enseguida se puso a mi disposición.
No puedo remediarlo, cuando me pongo delante de uno de estos órganos imponentes me entra un miedo irracional a no estar a la altura.Aunque mis conocimientos sobre el instrumento van en aumento, mis carencias son abundantes, por lo que siento como que voy a quedar en evidencia. Luego, en conversación con ella, no fué así, pero mi temor persiste.
Así como mi falta de educación ya que ella me preguntó amablemente cómo me llamaba pero yo no lo hice a la recíproca. Me explicó alguna característica del instrumento como que no tiene, en fachada, ningún tubo "canónigo", quizá debido al poquísimo espacio que tuvieron los organeros para la caja y había que aprovecharlo al máximo. Me explicó , relativo a la registración, las características que le distinguen de otros Cavaillé-Coll, y me hizo una pequeña demostración.
Pero cuál no sería mi sorpresa, cuándo se bajó del asiento y me ofreció ocupar su puesto. Me hice el remolón, pero deseándolo en mi fuero interno, y al insistirme ya no me resistí. Fueron sólo cinco minutos pero estaba como en una nube. No acertaba a centrarme en una obra concreta y me limité a hacer una pequeña improvisación, animándome ella a que probase los distintos registros y combinaciones. Aquí sí, salió mi educación de colegio religioso, y me excusé, dejándole de nuevo su puesto en la consola. Siempre le estaré muy agradecido.
Y como no podía sacrificar más a mi señora esposa, esperando la hora del Concierto, me quedé con las ganas de escuchar a D. Esteban.
Pero no por ello me voy a olvidar de él ya que me basaré en sus escritos para describir mejor las características de este instrumento, empezando por hacer un poco de historia, que la tiene y no es sorprendente porque la historia, por repetida, ya no sorprende a nadie. Y me refiero al retraso en la entrega del instrumento en más de un año que desbarató los planes de la Cía. de inaugurarlo "para el día 22 de Julio por la extraordinaria solemnidad de las grandes funciones que van a preceder este año a la fiesta de San Ignacio de Loyola". Era el año 1.888.
Otro bello ejemplar de órgano romántico de la última época del famoso organero Cavaillé-Coll, que asimismo se ha mantenido en estado original, sin haber sufrido transformaciones sonoras. Su coste ascendió a 60.000 pesetas y según documentos aportados por Esteban Elizondo se entregó el 6 de Junio de 1.889 siendo inaugurado cuatro días más tarde. Por lo tanto, su entrega se retrasó casi un año, originándose un tenso cruces de cartas recriminatorias por parte del Presidente de la Junta Sr. Ibero, agravado por los problemas financieros que acuciaban al constructor.
Hay que resaltar que en este coste no estaba incluida la caja ya que la hicieron dos Hermanos Jesuitas llamados Urdampilleta y Velasco que eran carpinteros y escultores y que, por lo tanto, su coste corrió a cargo de la Compañía. Inclusive estos Hermanos tuvieron que corregir al arquitecto ya que éste no se había percatado de que el coro tenía el techo más bajo por un lado que por otro. Al arquitecto Sr. Recondo, no le quedó más remedio que darles la razón y modificar su proyecto inicial.
Su fondo es de pino del Norte y sus adornos de nogal. Dentro, alberga 2150 tubos, siendo los 22 exteriores cantantes ya que D. Ignacio Aldalur Pbro. y Organista de la Villa de Azpeitia y amigo de los P.P.Jesuitas, se empeñó en poner " un registro más de Trompeta Real, cuyos tubos, por no caber dentro de la caja, se colocaron, por fuerza, según se acostumbra en España, por fuera". Lo que supuso un incremento de 120 tubos sobre los aceptado en las condiciones de la compra. Esta es la explicación a mi pregunta que le hice a la organista.
Antes de la inauguración y como era preceptivo, se nombra a D. José Ignacio Aldalur y a D. Felipe Gorriti, gran compositor, y a la sazón Organista de Tolosa " para que reconozcan el órgano y den su autorizado dictámen de acuerdo con el plan y condiciones de la Escritura Pública que se les adjunta". Ambos firman en Azpeitia el 9 de Junio de 1.889 el informe que en resúmen dice que "el órgano es magnífico y muy digno de la alta y universal reputación de la casa Cavaillé-Coll". Gorriti cobró 1.000 reales por su trabajo, no así Aldalur que no cobró nada por el exámen y además regaló el juego de la Trompeta Real. Pero esto no tuvo nada de altruista porque lo hizo como compensación al porcentaje que se llevó del coste del órgano y que corrió a cargo del factor.
Charles Carloni, fué el hombre de confianza y principal responsable de la Casa Cavaillé-Coll en relación con la mayor parte de los trabajos de organería realizados en España y a quien se le concedieron notarialmente amplios poderes para todo lo relacionado con el contrato de éste en concreto, y quien dirigió las obras de instalación de este órgano.
Llama la atención la ubicación interna de la tubería y maquinaria del instrumento en un espacio extremadamente reducido y la existencia de una Trompeta de Batalla que no figura entre los registros de la consola, accionándose la misma por medio de un enganche de pedal. Fue restaurado en 1973 por Organería Española S.A.
Dispone de tres teclados manuales de 56 notas y uno de pedal de 30, con un total de 37 juegos.
Disposición sonora I Teclado
Principal 26
Violón 26
Flautado 13
Salicional 13
Flauta Armónica 13
Violón 13
Octava
Tapadillo
Docena
Quincena
Lleno 5 puntos
Trompeta Magna 26
Trompeta Real 13
Clarín
II Teclado
Principal 13
Unda Maris 13
Violón 13
Dulciana 61/2
Octavin
Campanilla 1-3 h.
Fagot-Oboe
Clarinete
III Teclado
Flauta Travesera 13
Viola de Gamba 13
Voz Celeste 13
Flauta Octvª 61/2
Trompeta 13
Clarin
Voz Humana
Corneta 5 puntos
Pedal
Flautado Mayor 26
Contrabajo 26
Flautado 13
Bombarda 26
Trompeta 13
Clarin
Enganches: I/P, II/P, III/P, II/I, III/I, III/II. Llamadas lengüetería exterior e interior. Trémolo II y III. Octavas graves I. Octavas graves III/I. Máquina neumática. Tempestad. Pedales de expresión II y III.
Sólo se le han realizado dos reparaciones de importancia, una en 1.927 encargada a Fernand Prince con un coste de 7.000 pts. debido a la opinión totalmente positiva del P.Bianchi S.J.. Considera que es la persona que "con mayores garantías de trabajo de armonización puede realizarlo ya que es la competente especialidad del Sr. Prince de todos reconocida"
La segunda es de 1.973 y se le encargó a la empresa radicada en Azpeitia y que sobresalía entonces, ORGANERIA ESPAÑOLA S.A., respetándose integramente las características originales.
Desde entonces, un antiguo empleado de esta empresa, José Antonio Azpiazu, se ha hecho cargo de su mantenimiento.
http://www.youtube.com/watch?v=4vBfIoPfS2k&feature=relmfu
La segunda es de 1.973 y se le encargó a la empresa radicada en Azpeitia y que sobresalía entonces, ORGANERIA ESPAÑOLA S.A., respetándose integramente las características originales.
Desde entonces, un antiguo empleado de esta empresa, José Antonio Azpiazu, se ha hecho cargo de su mantenimiento.
http://www.youtube.com/watch?v=4vBfIoPfS2k&feature=relmfu
Este órgano está situado en el coro justo encima de la puerta principal, frente al Altar Mayor. Su espacio está muy limitado en capacidad y altura siendo un ejemplo claro de cómo se puede ocupar un espacio tan exiguo al máximo de sus posibilidades. La fachada está dividida en tres cuerpos. Los dos laterales contienen cinco paneles con tubos de Flautado, mientras que el central sólo tiene tres, entre los que se encuentran los de la Trompeta de Batalla que no figura en la disposición registral. Este funciona por medio de un enganche de llamada situado junto al resto de acoplamientos y palancas.
Sólo me queda añadir mi impresión personal. Imponente. Como el Templo, redondo. Sin fisuras. Alguna desafinación que no empaña el conjunto. Quizá un poco duro el teclado del Positivo al que te acostumbras enseguida. Una pena no haberme podido quedar al Concierto, precisamente, de D. Esteban. En otra ocasión será.
A modo de anécdota acompaño el Programa de este Concierto, dedicado, qué ironía, a AQUILINO AMEZUA en el Centenario de su muerte (1.847-1.912). Y digo esto porque todos conocemos el "cariño" que D.Aquilino les tenía a todos los organeros extranjeros y sobre todo, a su gran rival ARISTIDE CAVAILLÉ-COLL, autor de este órgano.
De "El Organista español".- Autor Eduardo Torres en obra dedicada al Padre Nemesio Otaño S.J.
1.- Adviento-Ofertorio
2.- Stella matutina
3.-Allegro
4.-Meditación
5.-Pastoral
6.-Ofertorio Pascual
7.-Plegaria
8.-Berceuse
9.-Lamento
10.-Meditación III
Ofertorio de la mayor.- José Mª Beobide (1882-1967)
Adagio (1909).- Nemesio Otaño S.J. (1880-1956)
El Buen pastor (3ª parte del Tríptico del Buen Pastor).- Jesús Guridi (1886-1961)
Sólo me queda añadir mi impresión personal. Imponente. Como el Templo, redondo. Sin fisuras. Alguna desafinación que no empaña el conjunto. Quizá un poco duro el teclado del Positivo al que te acostumbras enseguida. Una pena no haberme podido quedar al Concierto, precisamente, de D. Esteban. En otra ocasión será.
A modo de anécdota acompaño el Programa de este Concierto, dedicado, qué ironía, a AQUILINO AMEZUA en el Centenario de su muerte (1.847-1.912). Y digo esto porque todos conocemos el "cariño" que D.Aquilino les tenía a todos los organeros extranjeros y sobre todo, a su gran rival ARISTIDE CAVAILLÉ-COLL, autor de este órgano.
De "El Organista español".- Autor Eduardo Torres en obra dedicada al Padre Nemesio Otaño S.J.
1.- Adviento-Ofertorio
2.- Stella matutina
3.-Allegro
4.-Meditación
5.-Pastoral
6.-Ofertorio Pascual
7.-Plegaria
8.-Berceuse
9.-Lamento
10.-Meditación III
Ofertorio de la mayor.- José Mª Beobide (1882-1967)
Adagio (1909).- Nemesio Otaño S.J. (1880-1956)
El Buen pastor (3ª parte del Tríptico del Buen Pastor).- Jesús Guridi (1886-1961)