Ya he dicho en varias ocasiones que mi actividad no profesional, de mero aficionado, gira en torno a la música desde dos vertientes distintas: Una como instrumentista de órgano "religioso" y otra como coralista. Esta actividad, que , con parones, he disfrutado desde niño, me ha dado y me sigue dando muchas satisfacciones, quizá más que como organista, porque pones de tu parte algo totalmente tuyo, tu propio instrumento, que es la voz. Y esto requiere un entrenamiento, una disciplina y un esfuerzo mayor.
Pero hay algo que los diferencia y que los complementa a la vez y que satisface por completo el "ego". Con el órgano te encuentras sólo, normalmente en penumbra, y en espacios muy grandes y con una acústica especial en ese recinto vacío.En el mundo coral, lo esencial es el conjunto, la harmonía y la comunión con los demás compañeros. De esta unión nace, se desarrolla y expira el llevar a un buen término una obra salida de la inspiración de alguien con unos dones especiales como es la composición. Es algo que he admirado toda mi vida. Cómo puede salir del cerebro de una persona esas obras tan maravillosas que todos conocemos. Y la siguiente pregunta que te haces es: Y porqué no tengo yo ese don, esa facilidad, esa creatividad que pueda emocionar a los demás.
Quizá, como ejercicio, algún día lo intente y sólo servirá para darme cuenta de que esa no es una de mis cualidades y que soy un inútil para ello. Pero en esta vida, y sobre todo cuando te va quedando poca, tienes que ser capaz de atreverte con acciones que en otra edad no te has atrevido, por educación, por el qué dirán, o por una auto castración estúpida.
Esto me lleva a una de mis reflexiones diarias, prácticamente desde el mismo momento en que me levanto todos los días. Porqué dejé el Coro de toda la vida, de voces graves, para irme, sin solución de continuidad a otro mixto?
Aparte de una mayor libertad, el hecho de explorar otras formas de cantar, otros repertorios, otras sensaciones descubiertas y aprendidas en los cursos a los que he ido. Y porque entiendo que, debido a mi edad, mi vida coral ya no tiene mucho recorrido y quiero apurarla hasta las últimas consecuencias. Eso sí, quiero dejar muy claro que no soy ningún divo, ni solista, ni siquiera destacado. Soy un mero coralista de base que pone todo de su parte y que da todo, tanto en los ensayos como en los conciertos.
Una vez realizado el desahogo emocional, paso a describir el Concierto que ayer dimos en la Catedral.
Este Concierto estaba patrocinado por el Aula de Cultura de "El Correo" y debido a las fechas a las que nos aproximamos, era de los llamados "Sacro". Pero no al estilo tradicional y en lo que caen la mayoría de los Coros. Sin renacimiento, sin Barroco, sin Palestrinas, sin Bach, sin T.L.de Victoria, sin Mendelssohn, etc... lo que puede parecer cojo o incompleto.Todo el repertorio era del Romanticismo, alguna obra del Romanticismo tardío, del Neoclasicismo, y hasta autores vivos o hace muy poco fallecidos.
De los Conciertos bonitos de escuchar, resultón, con obras muy digeribles para el gran público que sólo va al Concierto con el oido y le gusta disfrutar con él. El programa confeccionado por Enrique era estupendo tanto para el oyente como para el cantante, no de mucha dificultad aunque sí lo sería para la mayoría de los Coros. Obras a 6, 7 y hasta 8 voces mixtas,algunas de ellas muy contrapuntísticas, delatan la complejidad de las mismas. Este fué el repertorio:
Música Coral Romántica y del s. XX
Beati quorum C.V.Stanford (1852-1924)
Cor mundum crea Vytautas Miskinis (1954)
Missa Brevis Vytautas Miskinis (1954)
-Kyrie
-Gloria
Bogoroditse Devo S. Rachmaninov (1873-1943)
Ave Maria Franz Biebl (1906-2001)
Pie Jesu Andrey Lloyd Webber (1948)
Kyrie J. G. Rheinberger (1839-1901)
Abendlied J.G. Rheinberger (1839-1901)
O vos omnes Pau Casals (1852-1908)
Dulcissima Maria Dante Andreo (1949)
Kyrie-African Sanctus D. Fanshawe (1942-2010)
Ain´t Got Time… H. Johnson (1888-1970)
Zuzendaria-Director:
ENRIQUE AZURZA
Bakarlariak-Solistas:
Raquel Urquijo
Iratxe Zarandona
Se hace difícil destacar alguna en concreto, pero por hacer una valoración propia y que no tiene porqué coincidir con mis compañeros coralistas, destacaría en primer lugar, los dos Ave María. No me duelen prendas en expresar mi repulsa a lo que ha hecho Enrique con los dos Gregorianos del Ave María de Biebl. Quitar el primer gregoriano cinco minutos antes del Concierto denota muy poca confianza en sus hombres que ya reconoció dándoles en el último ensayo el segundo gregoriano a las mujeres. No se puede mutilar de esa manera una obra tan excelsa como esta.
Lo que debería de haber hecho es trabajar más esta parte con los hombres e inclusive,en todo caso, elegir a un grupo de ellos que mejorasen al conjunto. Pero el gregoriano no está hecho para las voces femeninas, exige una adaptación para ellas, y además, a mi forma de ver lo "gritaron" más que rezarlo, que en definitiva eso es el gregoriano, un rezo.
El Ave María de Dante Andreo, gran compositor y amigo, es una pocholada. El ritmo impuesto en la obra, perfectamente acoplado a la palabra, te hace balancear con el canto, te lleva a una especie de baile acompasado y no puedes evitar que ese alma que todos tenemos se eleve por encima del propio cuerpo.
Después destacaría una obra que, por no ser muy pródigo su autor en estos terrenos, tiene por ello más valor. Me refiero al "O Vos Omnes" de Pau Casals. Plena de espiritualidad, denota su orígen y profesión "chelista" con ese sonido tan romántico.
Y en tercer lugar destaco, cómo no, el Bogoroditse Devo de Rachmmaninov, que en realidad es el tercer Ave María, ya que eso significa en búlgaro. Es difícil contener la voz, es complicado mantener ese piano, pianíssimo, inicial, con esos crescendo y decrescendo en el intermedio..............Precioso.
En general, el concierto fue bueno, muy puestos, perfectamente adaptados al repertorio y su significado, muy disciplinados y siguiendo en todo momento y fielmente las indicaciones de Enrique. No hay que perder de vista que, en definitiva, era un Concierto Sacro con todas las connotaciones que ello tiene. Pero la Catedral estuvo llena , con mucha gente de pie, y fué generosa en sus aplausos. Yo creo que muy sinceros y agradecidos por lo que habían escuchado.
Capítulo aparte merecen nuestras solistas. Un lujo. La obra, Pie Jesu, exigía un plus de musicalidad, dicción, generosidad en la voz, y ellas lo dieron todo.Plenas, una con la voz más hecha que la otra, pero ambas dándolo todo. Mi más sinceras felicitaciones a Raquel e Iratxe, Iratxe y Raquel. Es muy fácil cantar con ellas, acompañarlas en el eco fresco y lejano. Hasta los hombres se superaron para estar a su mismo nivel.
Ya me gustaría conocer las opiniones de personas con más conocimientos que yo. No solemos coincidir, pero estoy convencido que, en esta ocasión, sí. Esperaremos a escuchar la crítica que nos haga Enrique el próximo ensayo.
Pero hay algo que los diferencia y que los complementa a la vez y que satisface por completo el "ego". Con el órgano te encuentras sólo, normalmente en penumbra, y en espacios muy grandes y con una acústica especial en ese recinto vacío.En el mundo coral, lo esencial es el conjunto, la harmonía y la comunión con los demás compañeros. De esta unión nace, se desarrolla y expira el llevar a un buen término una obra salida de la inspiración de alguien con unos dones especiales como es la composición. Es algo que he admirado toda mi vida. Cómo puede salir del cerebro de una persona esas obras tan maravillosas que todos conocemos. Y la siguiente pregunta que te haces es: Y porqué no tengo yo ese don, esa facilidad, esa creatividad que pueda emocionar a los demás.
Quizá, como ejercicio, algún día lo intente y sólo servirá para darme cuenta de que esa no es una de mis cualidades y que soy un inútil para ello. Pero en esta vida, y sobre todo cuando te va quedando poca, tienes que ser capaz de atreverte con acciones que en otra edad no te has atrevido, por educación, por el qué dirán, o por una auto castración estúpida.
Esto me lleva a una de mis reflexiones diarias, prácticamente desde el mismo momento en que me levanto todos los días. Porqué dejé el Coro de toda la vida, de voces graves, para irme, sin solución de continuidad a otro mixto?
Aparte de una mayor libertad, el hecho de explorar otras formas de cantar, otros repertorios, otras sensaciones descubiertas y aprendidas en los cursos a los que he ido. Y porque entiendo que, debido a mi edad, mi vida coral ya no tiene mucho recorrido y quiero apurarla hasta las últimas consecuencias. Eso sí, quiero dejar muy claro que no soy ningún divo, ni solista, ni siquiera destacado. Soy un mero coralista de base que pone todo de su parte y que da todo, tanto en los ensayos como en los conciertos.
Una vez realizado el desahogo emocional, paso a describir el Concierto que ayer dimos en la Catedral.
Este Concierto estaba patrocinado por el Aula de Cultura de "El Correo" y debido a las fechas a las que nos aproximamos, era de los llamados "Sacro". Pero no al estilo tradicional y en lo que caen la mayoría de los Coros. Sin renacimiento, sin Barroco, sin Palestrinas, sin Bach, sin T.L.de Victoria, sin Mendelssohn, etc... lo que puede parecer cojo o incompleto.Todo el repertorio era del Romanticismo, alguna obra del Romanticismo tardío, del Neoclasicismo, y hasta autores vivos o hace muy poco fallecidos.
De los Conciertos bonitos de escuchar, resultón, con obras muy digeribles para el gran público que sólo va al Concierto con el oido y le gusta disfrutar con él. El programa confeccionado por Enrique era estupendo tanto para el oyente como para el cantante, no de mucha dificultad aunque sí lo sería para la mayoría de los Coros. Obras a 6, 7 y hasta 8 voces mixtas,algunas de ellas muy contrapuntísticas, delatan la complejidad de las mismas. Este fué el repertorio:
Música Coral Romántica y del s. XX
Beati quorum C.V.Stanford (1852-1924)
Cor mundum crea Vytautas Miskinis (1954)
Missa Brevis Vytautas Miskinis (1954)
-Kyrie
-Gloria
Bogoroditse Devo S. Rachmaninov (1873-1943)
Ave Maria Franz Biebl (1906-2001)
Pie Jesu Andrey Lloyd Webber (1948)
Kyrie J. G. Rheinberger (1839-1901)
Abendlied J.G. Rheinberger (1839-1901)
O vos omnes Pau Casals (1852-1908)
Dulcissima Maria Dante Andreo (1949)
Kyrie-African Sanctus D. Fanshawe (1942-2010)
Ain´t Got Time… H. Johnson (1888-1970)
Zuzendaria-Director:
ENRIQUE AZURZA
Bakarlariak-Solistas:
Raquel Urquijo
Iratxe Zarandona
Se hace difícil destacar alguna en concreto, pero por hacer una valoración propia y que no tiene porqué coincidir con mis compañeros coralistas, destacaría en primer lugar, los dos Ave María. No me duelen prendas en expresar mi repulsa a lo que ha hecho Enrique con los dos Gregorianos del Ave María de Biebl. Quitar el primer gregoriano cinco minutos antes del Concierto denota muy poca confianza en sus hombres que ya reconoció dándoles en el último ensayo el segundo gregoriano a las mujeres. No se puede mutilar de esa manera una obra tan excelsa como esta.
Lo que debería de haber hecho es trabajar más esta parte con los hombres e inclusive,en todo caso, elegir a un grupo de ellos que mejorasen al conjunto. Pero el gregoriano no está hecho para las voces femeninas, exige una adaptación para ellas, y además, a mi forma de ver lo "gritaron" más que rezarlo, que en definitiva eso es el gregoriano, un rezo.
El Ave María de Dante Andreo, gran compositor y amigo, es una pocholada. El ritmo impuesto en la obra, perfectamente acoplado a la palabra, te hace balancear con el canto, te lleva a una especie de baile acompasado y no puedes evitar que ese alma que todos tenemos se eleve por encima del propio cuerpo.
Después destacaría una obra que, por no ser muy pródigo su autor en estos terrenos, tiene por ello más valor. Me refiero al "O Vos Omnes" de Pau Casals. Plena de espiritualidad, denota su orígen y profesión "chelista" con ese sonido tan romántico.
Y en tercer lugar destaco, cómo no, el Bogoroditse Devo de Rachmmaninov, que en realidad es el tercer Ave María, ya que eso significa en búlgaro. Es difícil contener la voz, es complicado mantener ese piano, pianíssimo, inicial, con esos crescendo y decrescendo en el intermedio..............Precioso.
En general, el concierto fue bueno, muy puestos, perfectamente adaptados al repertorio y su significado, muy disciplinados y siguiendo en todo momento y fielmente las indicaciones de Enrique. No hay que perder de vista que, en definitiva, era un Concierto Sacro con todas las connotaciones que ello tiene. Pero la Catedral estuvo llena , con mucha gente de pie, y fué generosa en sus aplausos. Yo creo que muy sinceros y agradecidos por lo que habían escuchado.
Capítulo aparte merecen nuestras solistas. Un lujo. La obra, Pie Jesu, exigía un plus de musicalidad, dicción, generosidad en la voz, y ellas lo dieron todo.Plenas, una con la voz más hecha que la otra, pero ambas dándolo todo. Mi más sinceras felicitaciones a Raquel e Iratxe, Iratxe y Raquel. Es muy fácil cantar con ellas, acompañarlas en el eco fresco y lejano. Hasta los hombres se superaron para estar a su mismo nivel.
Ya me gustaría conocer las opiniones de personas con más conocimientos que yo. No solemos coincidir, pero estoy convencido que, en esta ocasión, sí. Esperaremos a escuchar la crítica que nos haga Enrique el próximo ensayo.
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